Suscríbete en: Itunes | Ivoox | Spotify
Si te gusta el contenido que genero, recibe cada día una píldora, reflexión, aprendizaje o simplemente información en un mail corto y al grano. Además por suscribirte, te enviaré un plan de 10k totalmente gratuito para implantarlo en Training Peaks
Seguro que has oído o incluso usado expresiones como:
- me quema el lactato en las piernas
- va de lactato hasta las orejas
incluso yo he escuchado que antiguamente los ciclistas llevaban alfileres para darse pequeños pinchazos y expulsar el lactato (esto siempre he pensado que ha sido más bulo que otra cosa)
La cuestión es que si alguien sigue usando esa jerga, quiere decir, que se resiste a cambiar su forma de hablar o bien que no se ha actualizado absolutamente nada.
Puesto que el lactato no es el enemigo.
Todos conocemos la existencia de nuestro VT2 o segundo umbral, a partir del cual la fatiga viene de forma inexorable.
Pero si lo calculamos en base al lactato encontraremos que tenemos el LT2, que siempre se ha estimado en 4 mmol a partir del cual la producción de lactato excede la capacidad del organismo para resintetizarlo.
Aquí podemos hacer nuestra que correlación no implica causalidad, es decir, que el lactato aumente a la par de la fatiga no quiere decir que sea el causante de esta. Sería como decir que la fatiga proviene del aumento de la sudoración, del aumento de la FC o del consumo de O2.
Entonces, ¿quién es el causante de la fatiga muscular, o más bien de la acidificación del músculo?
Es la acumulación del protón (H+), que coincide, pero que no es causada por la producción de lactato, de donde resulta la disminución del pH celular (acidosis metabólica). Cuando el equilibrio químico dentro del músculo se hace más ácido, el ritmo de la glucolisis se enlentece debido a que determinadas enzimas son bloqueadas. Existe también un deterioro del ritmo de transmisión de las señales eléctricas desde la neurona motora a la fibra muscular – la fibra muscular tarda más tiempo en relajarse después de la contracción en preparación para la siguiente. (Fernando Navarro)
El lactato incluso puede ser usado para obtener energía en el ciclo de Cori, otra cadena de reacciones que se producen en el hígado.
Por tanto más que hablar de entrenamientos de tolerancia al lactado, como se ha hablado durante toda la vida, deberíamos de hablar de entrenamiento de tolerancia a la acidosis.
Esos entrenamientos de alta intensidad, con poca recuperación buscando “acumular lactato” nos servirán para amortiguar ese ácido, lo que se conoce como “capacidad tampón”.
En función del momento y de la duración de nuestra prueba, cobrará más importancia todas estas reacciones.
Saludos